sábado, 10 de noviembre de 2018

Así se diferencia un ataque al corazón de un ataque de pánico...

Ataques de pánico

Los ataques de pánico pueden confundirse con un ataque al corazón pero también puede aprenderse a distinguir entre ambos eficientemente pues cualquiera de ellos puede suceder a cualquier persona en momentos y lugares inimaginables, por tanto es vital saber distinguirlos para poder ayudar a alguien con la mayor precisión posible. Las diferencias son mínimas pero distintas.

Ataque al corazón

Los músculos del corazón necesitan fluir constantemente de sangre rica en oxígeno, las arterias coronarias son vitales porque son las responsables de brindarle al mismo el suministro necesario de sangre. Cuando las personas tienen enfermedad de arteria coronaria, es señal de arterias estrechas y la sangre no fluye como es debido generando como resultado materia grasa, proteínas, calcio y células inflamatorias que se amontonan a lo largo de las paredes de las arterias para formar depósitos de placa de varios tamaños duros en el exterior pero blandos internamente.

Cuando es duro, la cáscara externa se rompe y es a lo que se le conoce como ruptura de la placa en términos médicos, esto hace que las plaquetas entren en esta área y formen coágulos en la placa, si alguno de esos coágulos bloquea la arteria, el músculo cardiaco se hunde por falta de oxígeno, en un corto periodo de tiempo el músculo cardíaco puede morir y es cuando se produce el ataque al corazón.



Para reconocerlo, lee los siguientes consejos:

. El dolor constriñe el pecho durante el ataque.

. El dolor siempre aparecerá en el centro del pecho y eventualmente se moverá hacia abajo a lo largo del brazo izquierdo y la espalda.

. También puede extenderse a las áreas del cuello, dientes y mandíbulas.

. La intensidad del dolor varía, generalmente el dolor dura más de 5 minutos pero no afecta la respiración de una persona.

. Puede sentirse una sensación espinosa también, se limita casi siempre al brazo izquierdo y va acompañado de sudores fríos, pegajosos y sensaciones de náuseas, hasta se puede generar el vómito.

. Cuando el ataque al corazón alcanza su pico, las personas experimentan miedo en el centro, específicamente en los sentimientos de dolor en el pecho lo que los lleva a sentir que pueden morir rápido.

. También se manifiesta respiración acelerada.

. Ataques de pánico

Los ataques de pánico se producen cuando se inunda de adrenalina en momentos sin sentido, hay quienes lo experimentan ante el miedo profundo que sienten por algo como las alturas o al estar sentado en la seguridad del sofá. Cuando la adrenalina es liberada, se les imposibilita correr del miedo por lo que, el cuerpo se prepara para una pelea y el organismo toma esta acción por el acontecimiento indeseable que conduce a los ataques de pánico. Lo que sucede dentro del cuerpo cuando los ataques de pánico se liberan es conocido como métodos primarios de supervivencia, el ritmo cardíaco se incrementa para que la sangre rica en oxígeno pueda suministrársele a los músculos y extremidades para el exceso de energía.

Un ataque de pánico, golpean el pecho como si estuviera a punto de explotar, se agita la sangre del sistema nervioso para incrementar el tiempo de reacción, provoca temblor incontrolable en las extremidades, sudoración y falta de aliento. En el intento de inducir más oxígeno en el torrente sanguíneo, se comienza a hiperventilar generando más mareos y desorientación, terminarás exhalando tanto dióxido de carbono que tu cerebro perderá el control y equilibrio fino entre el dióxido de carbono y el oxígeno.

Reconócelo de la siguiente manera:

Se genera hasta en las circunstancias más comunes.
La mayoría de los síntomas alcanzan su pico máximo transcurridos 10 minutos.
El dolor se centra especialmente alrededor de la región del pecho y continua subiendo y bajando.
Al igual que en el caso del ataque al corazón, una sensación espinosa con una de entumecimiento puede ocurrir durante los ataques de pánico. Sin embargo, en este caso no se limita en el brazo izquierdo pues también aparece en el brazo derecho, dedos y piernas.
Se experimentan miedos irracionales, como miedo de ser sofocado o volverse loco.

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