Ni siquiera los animales podrían vivir sin un sistema circulatorio. Por eso es tan importante que, como todos tenemos solamente uno, aprendamos a cuidarlo. Existen muchas cosas que pueden afectar negativamente el sistema circulatorio. Entre otras cosas, el colesterol puede obstruir una arteria y evitar el flujo normal de la sangre.
También pudiera ser que padecemos de hipertensión o presión alta. En ambos casos, nuestras arterias sufren mucho más de lo que podemos imaginarnos.Muchas veces hemos escuchado hablar de la presión sanguínea.
Sin embargo, pocas veces nos hemos detenido a pensar ¿qué es? La presión sanguínea es la fuerza con la que el corazón empuja la sangre a través de las arterias. La misma también viene dada por la asiduidad y rigidez que tengan las paredes capilares del estómago.
Normalmente, quienes padecen de hipertensión o presión alta, son personas que han sufrido o están sufriendo de obesidad o condiciones crónicas de estrés. Cualesquiera de las dos cosas son susceptibles a cualquier persona. Por eso todos deberíamos prestar atención a este tema.
Es muy bueno que siempre llevemos un control de la presión de nuestras arterias. Si la sentimos algo acelerada o muy leve, debemos actuar de inmediato para evitar problemas mayores.
Si nos es posible, debemos acudir a un doctor de inmediato. En esto casos, nunca es recomendable automedicarse, pues podemos agravar todavía más la situación. El cuerpo nos puede dar señales cuando estamos teniendo problemas con las arterias y la presión sanguínea.
Entre algunas de esas señales podemos mencionar dolores de cabeza constantes, dolor en el cuello y el oído, calor que se enfoca principalmente en las orejas, migrañas muy fuertes, etc. Si tienes unos de estos síntomas, es probable que tengas problemas con la presión arterial.
Aunque existen muchas pastillas que pueden sernos muy útiles para estos casos, muchos buscan otras alternativas. El día de hoy queremos hablarte de una de estas alternativas naturales muy sencillas. Para prepararla necesitarás muy pocas cosas. A continuación, te dejamos todos los detalles al respecto.
Qué necesitaremos:
– Limones (4 unidades).
– Agua (2 litros).
– Ajo (3 cabezas).
– Raíz de jengibre (4 cm).
Preparación y uso:
El primer paso es licuar todos los ingredientes sin el agua. Luego, pondremos en una olla tanto el agua como el licuado y la pondremos a hervir a fuego lento. Llegado al punto de ebullición, apagaremos el fuego y dejaremos enfriar. Finalmente, cuando llegue a temperatura ambiente, le metemos a la nevera.
De esta poderosa bebida tomaremos 10 onzas antes de la cena todas las noches. Con eso tu presión arterial debería mejorar muchísimo. Si sigues las instrucciones al pie de la letra, podrás obtener resultados en tiempo record.
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